¿Cómo retener el talento en mi clínica de nutrición?

Retener el talento en tu clínica de nutrición es tan importante como que tus batidos de proteínas sean perfectos.

Hasta hace relativamente poco tiempo, los conceptos como bienestar laboral y salario emocional eran palabras sin sentido. Sin embargo, hoy en día, no hay trabajador que no busque beneficios más allá del salario base para elegir dónde quiere trabajar o si quiere quedarse.

Imagina esto: has encontrado al nutricionista ideal que hace que tus pacientes se sientan cómodos, tranquilos y contentos, pero ¿cómo asegurarte de que se quede en tu equipo? A continuación te comentamos algunas cuestiones que deberías tener en cuenta.

1. Cultiva relaciones de trabajo saludables. Lo sabemos, suena a cliché. Pero la realidad es que un buen ambiente de trabajo donde se fomente el compromiso y crecimiento profesional, se celebren los logros y se permita la conciliación entre vida laboral y personal, es la clave para retener el talento.

2. Ofrece oportunidades de desarrollo. ¿Quieres que los nutricionistas de tu clínica destaquen sobremanera? Entonces, apuesta por ellos e invierte en su formación continua, apóyalos para que asistan a ponencias, conferencias, talleres y demás cursos que amplíen sus conocimientos y habilidades.

3. Reconoce y premia el esfuerzo. Aunque te parezca que no, un simple “bien hecho” o “buen trabajo” ayuda a mantener la motivación de tu equipo. Además, no debes olvidar el reconocimiento público si el trabajo que realizan es excelente y constante; puede ser en redes sociales o en reuniones de equipo. Otra manera para subir el ánimo o premiar el trabajo duro es ofreciendo algún tipo de recompensa inesperada, como pueden ser bonos para comidas o cualquier otra actividad.

4. Fomenta un estilo de comunicación abierta. Es fundamental, establece canales de comunicación donde tus nutricionistas se sientan libres para expresar sus ideas, preocupaciones y sugerencias. Recuerda, una buena conexión es la clave para resolver cualquier problema o inconveniente antes de que se convierta en un dolor de cabeza.

5. Crea un sentido de permanencia. Si quieres que tu personal no se vaya y siga contigo por mucho tiempo, haz que se sienta parte del equipo y del centro. Estimular la colaboración entre compañeros y colegas no es fácil, pero siempre puedes organizar alguna actividad de equipo, celebrar los cumpleaños con algún detalle o llevar a cabo eventos especiales de vez en cuando.

6. Flexibilidad horaria y tiempo para comer. A todos nos gusta poder comer tranquilamente, incluso en los días de trabajo. Es por esto que ofrecer una pequeña sala donde tus profesionales puedan almorzar de manera cómoda y relajada, puede suponer un plus para ellos. A lo mejor no todos viven cerca de la clínica y no se pueden marchar a su casa para este rato. Además, este espacio servirá también para realizar algún descanso y desconectar del estrés laboral.

En cuanto a la flexibilidad horaria, está claro que hay que cumplir con las horas de trabajo establecidas, pero podría resultarles muy beneficioso poder elegir a qué hora entrar y salir. Es decir, un rango de media o una hora en la que ellos se sientan más cómodos o les resulte más sencillo. Imagina que en vez de entrar a las 8:00 de la mañana prefieren entrar a las 8:30 porque así les da tiempo a llevar a los niños al colegio. Saldrán media hora más tarde, pero trabajarán las mismas horas y seguramente más motivados.

7. Nuevos retos. Lo peor que les puede ocurrir, en este caso a tus nutricionistas, es verse estancados profesionalmente. Estar cansado de la rutina y no tener incentivos hace que el nivel anímico descienda y puedan sentir la tentación de buscar nuevos desafíos fuera de tu clínica. Para evitar esto, ofrece proyectos o tareas diferentes de vez en cuando y anímales a que exploren nuevos caminos o que investiguen por su cuenta para llenar ese vacío.

Llegados a este punto, es importante destacar que no tienes por qué implementar todas estas medidas, puede que ya cuentes con algunas o que otras no sean de tu agrado. Al final, se trata de encontrar buenas prácticas con las que tanto tú, como tus profesionales, os sintáis cómodos y reforcéis el compromiso mutuo.

No todo es el dinero

Hay otra cuestión que cada vez está más extendida y valorada, se trata del “pago emocional”. Esto consiste en remunerar con incentivos, en forma de bonos por objetivos, ascensos, viajes, cheques para actividades fuera del horario laboral o cualquier otra manera que se te ocurra.

Con esto estarás demostrando que te importan tus trabajadores y que velas por su bienestar físico y emocional. Sentirse cuidado, valorado y recompensado ayudará a mejorar su estado anímico y puede que se sientan más motivados y comprometidos con su trabajo, lo que significa que estarás reteniendo bien ese talento.

Telemedicina, ¿sí o no?

La oferta de los servicios de salud “online” está en auge. Esta nueva fórmula permite mejorar el estado físico y emocional, al mismo tiempo que potencia el vínculo de los profesionales con tu centro.

La nutrición está directamente relacionada con el bienestar, por lo que combinar la presencialidad de las citas con el servicio online puede resultar de lo más beneficioso. Lo ideal es que la primera consulta se realice en persona para hacer el reconocimiento inicial y, a partir de ahí, definir objetivos.

Realmente, las siguientes consultas para efectuar el seguimiento pueden realizarse hasta cierto punto de manera online. Está claro que hay que registrar los avances, pero algunas citas no requieren contacto directo con el paciente, así que se pueden agendar en los días que el profesional en cuestión esté teletrabajando.

En resumen, retener el talento en tu clínica de nutrición no es tarea sencilla, pero con un poco de esfuerzo y dedicación, puedes convertir a tu equipo en una fuerza imparable que ayude a tus pacientes a alcanzar sus objetivos de bienestar. Contar con un equipo asentado de profesionales es la clave para alcanzar el éxito en tu centro. ¡A por ello!